Comparte recursos
Hay algunas cosas que solo necesitamos de vez en cuando, como una llave inglesa o una escalera. Podríamos comprar todas las cosas que necesitamos, pero sería costoso, nos ocuparían mucho espacio y consumiríamos muchos valiosos recursos. ¡La solución es compartirlas con los vecinos! Te sorprendería la cantidad de recursos, habilidades y conocimientos que pueden compartir los vecinos. ¡Y tal vez tengas alguna conversión interesante de paso!
Tu impacto
Consejos y pasos de la acción
Introducción
Facilitar el intercambio de recursos es sencillo. El primer paso es crear una lista de recursos compartidos. Con una lista de recursos compartidos, todos sabrán a quién pueden acudir para obtener ayuda en determinados proyectos, así como quién tiene recursos para compartir y cómo comunicarse con ellos. También puedes planificar eventos de intercambio ocasionales para compartir cosas que ya no necesitas con otras personas o simplemente contactar con el grupo de vecinos cuando tengas cosas que ofrecer. Compartir con los vecinos ahorra tiempo, dinero y recursos, y te permite conocer a tus vecinos un poco mejor. ¡Una apuesta ganadora!
Cómo realizar esta acción: Sigue estos pasos y crea una lista de recursos compartidos en tu calle o vecindario.
Considera completar también las principales acciones en el hogar: Conoce los riesgos y recursos, Haz un plan, Crea tu kit y Resiliencia para propietarios de viviendas o inquilinos, que cubren los conceptos básicos de la preparación ante emergencias.
1Paso 1: Haz un plan para crear una lista de recursos compartidos
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Comprueba con algunos vecinos si les gusta la idea y les interesa participar. Pregúntales si desean impulsar la iniciativa añadiendo algunos recursos.
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Elijan el formato de la lista. Se recomienda incluir quién ofrece el recurso y cuál es la mejor manera de contactar con esa persona (¿prefiere un mensaje de texto, llamada o correo electrónico?). Usa Google Sheets u otra lista de fácil acceso que pueda configurarse de forma que esté disponible solo para los participantes. Es un método excelente de contar con una lista privada y fácil de usar.
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¡Pon un nombre a la lista! Puede llamarse Caja de herramientas comunitaria o Biblioteca de préstamos (puesto que también incluye habilidades). Ejemplo: Biblioteca de préstamos comunitaria de Greenacres.
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Añade unas pautas: Uno de los ingredientes más importantes de un plan de intercambio de recursos en el vecindario es la confianza. Introduce una lista de expectativas y responsabilidades básicas a la hora de pedir o compartir las cosas para generar confianza entre los vecinos participantes. Consulta con los vecinos interesados en participar si están de acuerdo con esas pautas o si tienen algo que añadir. Aquí tienes algunos ejemplos:
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Preguntar antes de tomar nada prestado.
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Incluir instrucciones de uso/cuidado, según sea necesario.
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Examinar cada artículo antes de prestarlo. Ofrézcanse solo a compartir artículos que no les importe compartir, por ejemplo, que no sean demasiado costosos, que no se rompan fácilmente o que no les importe perder en caso de accidente.
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Fijar una fecha/hora para devolverlo.
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Devolver los artículos en las misma condiciones o mejores.
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Aquí tienes más ideas de pautas para compartir recursos.
2Paso 2: Crea la lista de recursos compartidos de tu vecindario
Cuando cuentes con algunos vecinos interesados y tengas un documento básico preparado al que agregar recursos, podrás crear la lista. Aquí tienes algunas sugerencias para comenzar:
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Comienza solo con un par de vecinos a los que ya conozcas y en los que confíes. Luego, considera ampliar el círculo e introducir a otras personas del vecindario o de tu calle. La proximidad es un factor importante ya que, por lo general, la gente prefiere compartir sus cosas con los vecinos que viven cerca.
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Aporta ejemplos. Cuando los vecinos agreguen artículos a la lista, ¡anímalos a ser creativos e inclusivos! Las herramientas para trabajos pesados o artículos como quitanieves o escaleras resultarán muy útiles, pero otros artículos como juegos de mesa, juguetes para niños y máquinas de coser también serán fantásticas incorporaciones.
- Incluye habilidades y servicios. Cuidar niños o pasear mascotas, dar clases particulares de matemáticas o hacer pequeñas reparaciones son ejemplos de habilidades muy útiles y valoradas. Informa a los vecinos de que no pasa nada si desean añadir una nota sobre la necesidad de compensación por algunas habilidades o servicios.
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Revisa cuáles son los recursos comunitarios: Algunas ciudades también cuentan con una biblioteca de préstamo de herramientas o espacios públicos para creadores, con equipos como máquinas de coser, impresoras 3D y otras herramientas, que pueden estar dirigidos por agencias locales, organizaciones comunitarias o empresas con ánimo de lucro. Comprueba si hay algún programa local en tu zona. Si lo hay, añádelo a la lista para darlo a conocer a los vecinos.
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Incluye información sobre la tienda de Goodwill u otros lugares donde donar como opción para encontrar artículos usados en buen estado.
3Paso 3: ¡Comparte la lista!
Asegúrate de que todos los participantes tengan acceso a la lista y sepan cómo usarla. Poner a todos en contacto a través de un grupo de Google, un grupo de mensajes de texto u otra herramienta de comunicación también puede resultar de utilidad para publicar el enlace de la lista y las pautas. Anima a todos a que actualicen y editen su información en la lista cuando sea necesario. Envía recordatorios una o dos veces al año para que recuerden actualizar la información. Una vez que la lista esté en funcionamiento, considera la posibilidad de invitar a otros vecinos a participar y compartir.
4Paso 4: ¡Haz un intercambio o donación!
Una o dos veces al año, planifica un evento en el que los vecinos puedan llevar las cosas que ya no usan para ofrecerlas a los demás. ¡Haz que sea divertido! Organiza una fiesta en la que compartir comida o tomar pizzas. También puedes animar a los participantes a enviar o publicar los artículos que tienen en el grupo de vecinos a lo largo del año. Encuentra un buen hogar para esa vieja licuadora de inmediato, en el que la aprecien y la usen a menudo.